29 mayo 2007

Puente aéreo
29/05/2007
Las noticias curiosas nos hacen viajar por el mundo y visitar destinos que cambian nuestra forma de ver las cosas. Sí, lo sabemos, no en todas partes se aprecia el mundo de la misma manera. Hoy hay muchas discusiones, especialmente en grupos masculinos, sobre la ganadora del título Miss Universo. Se llama Riyo Mori, 20 años, japonesa y de físico espectacular. La discusión no va por si es guapa o no lo es, sino sí era la más guapa del certamen. Y aquí es donde los occidentales vamos a tener que admitir que el canon de belleza que hemos impuesto ya no es el mayoritario. Hay más asiáticos que puedan defender que Riyo Mori es más atractiva que, por ejemplo, la candidata brasileña que quedó primera dama Natalia Guimaraes y que seguro que gusta más por estos lares.
De todas maneras, el canon de belleza cambia, pero poco, de momento. Las japonesas pueden ser guapísimas, pero para ganar un certamen de Miss tiene que tener una altura que no es frecuente encontrar por las calles de Tokyo. De momento, occidente marca la altura.
Por cierto, que en esto de los certamenes de belleza, hay una potencia mundial que no pierde comba: Venezuela ha colocado en tercera posición a su candidata Ly Jonaitis, guapa, ligeramente artificial, e imaginamos que simpatizante de Chaves, no vaya a ser que en alguna entrevista le critique y le cierre las puertas de las "televisoras" afines al líder, vamos, las únicas que hay a día de hoy.
Y después de pasar por Japón, Brasil y Venezuela, viajamos a la fría Europa. En concreto a Polonia, que desconozco si ahora es época de frío por ahí pero frío da escuchar que en un país europeo se persigue a los homosexuales de la manera que se hace en Polonia, donde los dirigentes políticos se muestran abiertamente homófobos y la paranoia llega a tal extremo que han comenzado a investigar el comportamiento de Tinky Winky, y de los demás teletubbies, pudieran fomentar la homosexualidad en los niños.Siempre he pensado en que los Teletubbies son un peligro, pero más que nada porque son lo más cursi que se ha visto en décadas. Pero de ahí a pensar en la censura porque un ridículo muñeco sale con un bolso e insinúa actitudes homosexuales, es ya rizar el rizo. Recomiendo a Eva Sowinska, defensora de los derechos del Niño designada por el Gobierno que, ya puestos a buscar gays peligrosos, se fije en la sospechosa amistad entre Asterix y Obelix o la admiración de Robin hacia su maestro Batman. De Blancanieves y su convivencia con 7 hombres en una misma casa da pie a sospechar .Y no quiero seguir rebuscando en las historias de los personajes infantiles porque me he acordado de Pipi Calzaslargas, esa niña sueca con esas extrañas trenzas que vivía con un caballo moteado y un mono y ya me está pareciendo una depravada.