1 mayo 2007

Cambio de aires
01/05/2007
Cambiamos de mes y cambiamos de costumbres día a día. Lo que parece inalterable no lo es tanto. Los más conservadores lo tienen que estar pasando muy mal con la velocidad que lleva este loco mundo. Incluso en terrenos en los que parece que hay cuestiones que no merece la pena formular. Por ejemplo, en la indiscutible virilidad de los deportistas de elite y de los periodistas que cuentan lo que sucede en los terrenos de juego.
Han salido del armario guardias civiles, militares y algún que otro cura, pero siempre se ha animado a que alguna estrella deportiva, especialmente algún futbolista de elite, afirme públicamente su homosexualidad. Haberlos haylos, pero a ver quién es el guapo que alardea de serlo para que , en el momento que haga alguna mala jugada en el campo los energúmenos que siempre hay en las gradas tengan fácil el insulto a utilizar. Acordarse de la madre de uno queda descartado cuando puedes meterte con su opción sexual. Y lo mismo sucederá ahora con el periodista deportivo del diario Los Angeles Times, Mike Penner, que ha anunciado su cambio de sexo. En breve firmará sus artículos como Christine Daniels. Póngale un poco de imaginación a este asunto y piense en lo que daría que hablar aquí si alguno de los líderes mediáticos y deportivos de las ondas españolas ( se me ocurre algún que otro nombre) anunciara su cambio de sexo....
En cuestiones fúnebres, también estamos de cambio: lo del panteón familiar o la tumba con lápida dio paso al nicho, lo mismo que pasamos del caserío a vivir en el bloque de pisos. Del enterramiento, a la incineración, del ataúd, a la urna. Y en una nueva etapa, del lanzamiento de las cenizas al mar, en medio de un acto emotivo y bello, salvo que uno no esté atento a la dirección del viento y acabe tragándose las cenizas del difunto, como le sucediera a una conocida periodista del corazón con los restos del marido de Sara Montiel, Pepe Tous, hemos pasado a poner en órbita a los difuntos. Este ha sido el caso de un conocido actor de la serie Star Trek, y de algún astronauta. Desconozco si la cápsula con las cenizas queda suspendida en órbita, como los satélites, o tiene el mismo fin que el txupinazo de inicio de fiestas. Más que nada, lo digo por si es Ud. alérgico al polvo.