Michael Schumacher, el gran piloto de Fórmula Uno, vuelve a la competición. Todo un mito que regresa, que va a ser punto de mira de todo el mundo del automóvil. Será el duro competidor de Fernando Alonso, que pasa a Ferrari. Vamos, que la temporada promete, y que los aficionados están ansiosos de ver a sus campeones.
Pues bien, tanto interés en la vuelta de Schumacher para que lo que hoy veamos destacado en los medios sea que ha confesado que lleva cinco años tiñéndose el pelo. Curioso. Si fuera que lo ha dicho Penélope Cruz, que ha ganado mucho dinero anunciando productos capilares, sería noticia, pero que un señor que se gana la vida con un casco puesto, sorprende. ¿Tan poco interés despierta su faceta de deportista o es que ya se le ha preguntado todo en ese terreno?
Algo parecido también llamó mi atención cuando se anunciaba la publicación de la biografía del tenista Andrea Agassi, y lo más fascinante era que reconoció que usó peluca en alguna final. Vamos, que las cuestiones capilares siguen siendo cuestión de “estado” para algunos deportistas y para algunos periodistas.
¿Es una muestra de debilidad para un campeón quedarse calvo o tener canas? Que luego no digan que los hombres no somos coquetos y no nos preocupamos por la imagen. El tiempo también pasa por las estrellas, aunque lo quieran disimular, y eso tampoco debiera ser noticia.
domingo, 31 de enero de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario